martes, 20 de marzo de 2012

Bar Cultural El Revolucionario
Asociación Madres de Plaza de Mayo
 Hipólito Yrigoyen 1584 , CABA. 
Que quede claro, esta es una propuesta política para que los jóvenes tengan un lugar donde seguir construyendo militancia", explica Daniel Narezo.

Y agrega que un bar con un nombre semejante (porque de un bar se trata, aunque sea bastante más que eso) no podía funcionar en otro lado sino en este. Mientras tanto, junto a los artistas del colectivo Cultura Vallese, Narezo -que alguna vez fue productor de Alejandro Dolina y que hace un año abrió el restó Perón Perón en el corazón de Palermo-, acomodan las letras del cartel rojo y negro sobre la fachada del edificio, hasta que se lee la frase completa:
El Revolucionario.
Ese nombre tiende un hilo hacia los pañuelos blancos que se despliegan al atravesar la entrada, símbolo en el mundo de dignidad y resistencia.
Es que El Revolucionario es el nombre del flamante bar político que comenzará a funcionar en la sede de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, en Hipólito Yrigoyen 1584. 
Se va a inaugurar en la vigilia entre el 23 y el 24 de marzo, en vísperas del 36� aniversario del golpe cívico-militar. Por eso aquí todo es ebullición para ultimar detalles, aunque casi todo ya está instalado. Quien ingresa se encuentra, a la derecha, con un gran retrato del Che, vestido de uniforme militar, con su cigarro y esa sonrisa que revelaba cuán joven era el comandante.
A la izquierda, hay un friso que evoca a la Pachamama ("la resistencia originaria", apunta Narezo), al lado de la librería.
Y al frente, un retrato de Néstor y Cristina, juntos, obra de Sergio Tosoratti.
Más adentro, de lado a lado en el techo, cuelgan los pañuelos que diversos militantes y organizaciones de todo el mundo, le hicieron llegar a las Madres a lo largo de 35 años de lucha inclaudicable.
Allí, debajo, hay varios documentos que testimonian esa historia, desde la portada del primer número del Diario de las Madres de 1984, hasta fotografías con líderes políticos, entre ellas la que tiene la dedicatoria manuscrita "Para Hebe con mi afecto, Néstor."
Una de las características es que por primera vez se exhiben varios de estos objetos (en la barra cuelga una guitarra con la firma de Charly García y por ahí cerca se ve también un pasamontañas obsequiado por el subcomandante Marcos), aunque no con intención museística sino como manera de compartir testimonios del camino recorrido. 
La propuesta surgió hace unos meses, según el responsable de El Revolucionario que para este proyecto formó una sociedad con la productora radial Fabiana Segovia, entre otros.
Y agrega: "La idea es seguir el mandato de Cristina; es decir, alentar la militancia joven y su crecimiento. Para eso tiene que haber un traspaso generacional y hay que gestarlo rápidamente. Este lugar es un espejo donde podemos mirar una generación entera de líderes y conductores, muchos de ellos asesinados en mano de la dictadura y muchos otros llevando adelante procesos de cambio en el presente.
En ese espejo también se reflejan las Madres y el proceso de transformación que alientan para los que vienen detrás." 
En el Bar "El Revolucionario" se realizarán presentaciones de libros y debates culturales. También habrá milongas, peñas, recitales y ciclos de teatro. "Este lugar se va a convertir en un punto neurálgico para discutir política", asegura Narezo mientras a su lado pasan los alumnos de la Universidad Popular de la Madres.

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